Portada de mi libro

Portada de mi libro
Diseño Alfredo Viguer

Nuevo Libro

Nuevo Libro
Portada Alfredo Viguer

Accede a mi libro

Clicando en el enlace podrás descargarlo gratuitamente o bien comprarlo. Para latinoamérica también, aunque no para todos los paises. Gracias

Seguidores

jueves, 26 de agosto de 2010

Pasos

Hoy me he decidido a bajar a la calle. Me he encendido un pitillo y he empezado a andar, que raro es todo, yo no fumo. Pero hoy todo me da igual. Me cruzo con personas, todos tienen su cabeza pegada al cuerpo, un par de brazos y algunos y algunas unas piernas horrorosas, no digamos del tronco, parecen masas mal formadas. Menos mal que las veo distorsionadas sino empezaría a vomitar y no podría parar. Algún perro me mira con cara de incomprensión, porque me atan a una cuerda, porque me pegan cuando saco de mi los flujos naturales, porque una persona pequeña me estira el pelo y yo no puedo defenderme, porque soy tan malo si solo quiero cariño... parece que es lo único coherente que oiré hoy. Quizás por mis palabras parecería que estuviera deprimido o algo desquiciado, ¡que va! hoy me siento bien.
Las calles son empinadas, mis piernas se van endureciendo cada vez más, ¿llegaré a ese punto en dónde las calles bajan?, seguro que si. Ya está ya veo ese punto, por fin podré relajar mis extremidades, esta bajada hará más fácil mi camino. Lástima que tropiezo con el primer paso y mi camino plácido se convierte en ir rodando calle abajo. Voy a cámara lenta y puedo observar como me miran las personas con cara de sorpresa. Algunos gritan: !Oh que alguien lo pare! !Pobre se hará daño!...otros se ríen. Me golpeo con un BMW mal aparcado en un paso cebra, después con un contenedor de basura mal puesto, arroyo a un anciano y me llevo su dentadura pegada en el hombro, parece que todo va bien. Cuando llegue a mi destino podré relatar todo lo ocurrido. Nada.
Sigo rodando por la avenida sin sentido, al fondo veo la puerta blanca que accede a mi fin. Que somos sino unos caminantes que esperan atravesar la puerta final. No, no hablo de la muerte. Hablo de asesinar un día más. Para mi un minuto es una vida, para otros un suspiro, los segundos se me pegan al cuerpo cada vez que transcurren, parezco un cactus intemporal. Intento recordar cuando mi vida era normal, o es ahora. Ya no lo sé. Da igual las paredes acolchadas me esperan en breve, intentaré rodar más deprisa para que no me cojan. Es inútil, voy directo a ellos. Ya me esperan. Quieren que disfrute del paseo matutino, pero no veo lo que ellos quieren que vea, por eso quiero rodar, pero no me dejan. Batas blancas, irracionalidad, babas, ojos en blanco, familias que miran sus relojes para irse a sus casas y así cumplir el cupo del mes, "he visto a mamá 2 minutos este mes, me voy"... ese tiempo es un mundo aquí. El jardín me arde en los pies. El olor a jazmín me dan nauseas y vomito en cuanto no me ven los de blanco. Supongo que los narcóticos ayudan a ese proceso de regurgitar los alimentos precocinados, secos, aguados o pastosos. Quizás no tengamos un concepto acertado de la realidad pero nuestras papilas gustativas son como la de los demás, quizás varíe un poco porque se nos duerme la lengua a veces, las amarillas son las más odiosas no te dejan expresar con sonidos coherentes. Pero el cerebro si que va funcionando, yo odio las azul cielo, esas te nublan el entendimiento y eso no lo soporto, ¿estoy hablando?.
Ya queda poco para golpear con mi cuerpo la puerta blanca, la sirena de las doce suena, es como un martilleo incansable en la sien. No hace falta que me cojáis por los brazos por desgracia ya se el camino, y si no me drogarais tanto podría usar eso que vosotros llamáis piernas. Cuando te arrastran siempre hay algo que duele, si el alma también, o la auto estima, o las ganas de vivir, pero me refiero a los empeines, se doblan los pies ya que pesan varias toneladas los dedos se doblan y primero pierdes la zapatilla izquierda la derecha ya no sabes donde está, entonces la gravilla del camino hace estragos con las falanges, la piel se va desgarrando poco a poco y gotitas de sangre vuelven a aparecer en las costras de unas heridas antiguas. Todo queda en nada cuando el jardinero saca la manguera y hace su trabajo. Nadie me pregunta como estoy, nadie se preocupa de mi estado. Veo a esa aloevera tan bien cuidada que desearía ser ella. Pero no, simplemente soy yo, soy...el número 88 creo que de apellido Room, o eso es lo que oigo cuando me vienen a buscar. Que majos son para que no olvide mi habitación han puesto mi nombre en la puerta, en una chapita plateada bastante mona: "88 room". Que amables me dejan caer en mi cama, no se habrán dado cuenta pero no han acertado mucho eso o he rebotado hasta el suelo, menos mal que está algo acolchado. No se cuanto tiempo llevo aquí pero quiero cerrar los ojos y esperar de nuevo a encenderme un pitillo, ¿les he dicho que no fumo?

22 comentarios:

  1. Uff, has logrado que me meta dentro de tu personaje y sienta angustia. Yo tampoco fumo...

    ResponderEliminar
  2. Hellooo from Greece and ΣτάΛες στο ΓαΛάΖιο blog team!!!
    Nice post...and http://www.youtube.com/watch?v=gmjjHkxTItE no smoking too....

    ResponderEliminar
  3. Yo tampoco fumo pero me quedo a seguirte , estoy tomado un cafecito y lee que lee :)

    Encantada de poder disfrutar de tus letras desde mi blogg333

    Un abarzo

    ResponderEliminar
  4. Qué grande, nen... parece que la bestia seguía ahí, agazapada dentro tuyo, eh? Sueltala!!! Muy bueno este último!

    ResponderEliminar
  5. Gracias a todas/os!!!! voy creando cosillas...muy lejos de lo que hacía!!! cositas nuevas ahora que no tengo mucho tiempo para dedicarme a los proyectos... algunos en común Alfredo juas juas...

    Saludos!

    ResponderEliminar
  6. Interesante trabajo.
    Un saludo desde el fin del mundo

    ResponderEliminar
  7. Por cierto...la portada de tu libro es realmente maravillosa, imagino que su contenido será igual

    besus

    ResponderEliminar
  8. ...traigo
    sangre
    de
    la
    tarde
    herida
    en
    la
    mano
    y
    una
    vela
    de
    mi
    corazón
    para
    invitarte
    y
    darte
    este
    alma
    que
    viene
    para
    compartir
    contigo
    tu
    bello
    blog
    con
    un
    ramillete
    de
    oro
    y
    claveles
    dentro...


    desde mis
    HORAS ROTAS
    Y AULA DE PAZ


    TE SIGO TU BLOG




    CON saludos de la luna al
    reflejarse en el mar de la
    poesía...


    AFECTUOSAMENTE
    JUANJO




    ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE CACHORRO, FANTASMA DE LA OPERA, BLADE RUUNER Y CHOCOLATE.

    José
    Ramón...

    ResponderEliminar
  9. hola Juan,
    bienvenido a mi blog!

    Vi que aquí tiene muchas cartas trabajando juntos para dar forma a ideas y pensamientos
    muy interesantes ....
    para disfrutar de su tiempo ...

    abrazo desde Sao Paulo,
    Denise

    ResponderEliminar
  10. yo si fumo... pero ha sido como si no fumara.
    genial! te sigo.

    ResponderEliminar
  11. Uh, tu relato y la invariable propensión a pensar en Artaud y en esa idea comprobable de que somos locos de acuerdo a la moda psiquiátrica del momento.

    Si estorbamos al Sistema, toda la ciencia acude a nuestra desaparición.

    Yo fumo...pero me quedé pensando en tus pies lastimados.

    ResponderEliminar
  12. Por suerte que quedamos varios loquillos habitando el mundo.
    :)
    Cariños para ti.
    mar

    ResponderEliminar
  13. Te invito a seguir mi blog nuevamente:

    http://simplementemamarrachos.blogspot.com

    Totalmente renovados!

    *leizito

    ResponderEliminar
  14. Hola Juanjo te doy las gracias por pozarte en mi mundo virtual,que relato es muy coerente,
    cuando no estamos muy de muy buen ánimo bemos
    las cosas diferente,espero solo sea un momento
    de esos, escribes muy bien te felicito, un placer leerte.
    Un abrazo grande que estes muy bien.

    ResponderEliminar
  15. ¡¡¡¡Felicidades Juanjo por tu libro espero leerlo,y gracias por seguirme estoy devorando tus textos en tu blog que es maravilloso, lo que he leido me gusta,y seguiré leyendo y con placer todo lo que pueda, y escribas..
    U abrazo de hada.

    ResponderEliminar
  16. Juanjo, me ha bastado leer este post para saber que quiero quedarme por acá a leer más.
    Besitos,

    ResponderEliminar
  17. Hoy he vuelto a leerte. Yo también fumo y confieso que es una buena porquería.
    En fin...somos hijos de la dicotomía

    Te sigo y agrego a mi ciberbiblio.

    Besos desde una incipiente primavera

    ResponderEliminar
  18. Gracias Plus, yo me voy paseando también por tus blogs. Es un placer ver como vais entrando.

    Besos desde el sanatorio...

    JJ

    ResponderEliminar
  19. hola Juanjo,
    una sorpresa agradable...
    Un blog interesante! Me es grato conocerte.
    ^^ ..sonrisas... pensando en lo que dirás cuando me leas...^^

    un escrito poco agradable...
    pero se por qué no me gusta... te lo digo? ... si... debo hacerlo.... porque poco me gustan las narraciones donde "la droga" ..en este caso "un pitillo" toman una papel importante en el desenvolvimiento de un personaje.
    Te enojas? no, verdad que no? Es mi opinión muy personal. También se lo comenté a Mamarracho ( que es tu seguidor) cuando hizo una narración bastante estupenda ( como la tuya!) donde el desgraciado "pitillo" hizo de las suyas. Desgraciado que no tiene gracia, solo ese significado te pongo a esta palabra.
    Espero que mi comentario tan directo no te enoje.
    Pero pienso, que si no me quedo aqui, no sabré si habrán otras historias parecidas o es por casualidad que esta narración fue única.
    Aquí me tendrás!
    Me disculpo desde ahora por mis posibles errores ortográficos. No lo hago nunca, pero esta vez lo quiero hacer. Mi español es sencillo y me esfuerzo lo que puedo en mis entradas. Algunas veces me salen bien, otras veces menos bien.

    Un saludo cordial^^
    un abrazo de amistad^^
    desde mi Berlín oscuro, húmedo (llueve), y frío.
    RR^^

    ResponderEliminar
  20. Tenía curiosidad por saber quién desde Alemania me leía... un placer.
    Respecto tu comentario ningún problema.. enfadarme porque leas y opines de mis textos???? jamás un gustazo!!!!!!!! pero: "Me he encendido un pitillo y he empezado a andar, que raro es todo, yo no fumo"...a veces las palabras no significan lo que quieren decir... cigarro, algo que dura poco... se desvanece, tiempo quemado...humo, alma, sensación de libertad para alguien que no la tiene...en fin: "¿les he dicho que no fumo? "

    Un placer tenerte por aquí.

    Küsse

    JJ

    ResponderEliminar
  21. Me encantó. Qué temita la Libertad hoy no? Me encanta como la mirás, desde lugares donde muchos no pueden... Gracias!

    ResponderEliminar